Ernesto Valverde tiró de un bloque muy titular para enfrentarse al Mallorca con cuatro días de distancia respecto a la cita contra el Slavia y seis por delante para recuperar antes de recibir el domingo al Betis, pero sorprendió con el hombre elegido para sustituir a Vivian en el eje de la zaga. Fue Yeray.
El central de Barakaldo llevaba sin jugar desde el 31 de agosto, cuando formó de inicio ante el Atlético en San Mamés en el último encuentro antes del primer parón de LaLiga. Se rompió el 11 de septiembre con una lesión muscular en el bíceps femoral de su pierna derecha y desde entonces no estuvo a disposición de Txingurri en siete partidos, cinco de Liga y dos de Europa League. Regresó a la convocatoria para recibir al Espanyol el pasado 19 de octubre pero no llegó a salir, lo mismo que en la cita siguiente contra el Slavia de Praga.
El ‘5’ hizo pareja con Aitor Paredes en el eje de la zaga. Le costó entrar en juego. Su primera salida con el balón controlado, una de sus grandes virtudes, se produjo en el minuto 17. Poco después recuperó una pelota, pero se precipitó en el envío. Ya para entonces, Julen Agirrezabala había evitado el 1-0 con una gran intervención con los pies a un disparo dentro del área de Muriqi.
El Athletic lo intentó pero se quedó con la miel en los labios el día que Yeray regresó a un buen nivel después de dos meses fuera. Un nuevo ‘refuerzo’ para la zaga.