El Almería ha tenido un comienzo decepcionante en la temporada de liga, registrando algunos de los peores resultados en su historia a pesar de una inversión cercana a los 45 millones de euros. El equipo rojiblanco apenas ha logrado acumular dos puntos de los 18 posibles, a pesar de haber disputado ya cuatro partidos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Las deficiencias defensivas bajo la dirección de Vicente Moreno siguen sin resolverse, ya que el equipo ha encajado un total de trece goles en contra, lo que equivale a más de dos por partido. El puesto de Moreno podría estar en peligro si no consigue una victoria en alguno de los dos próximos partidos de esta semana, que se jugarán en Sevilla y en casa contra el Granada. Sin embargo, en medio de esta situación complicada, Sergio Arribas se destaca como una noticia positiva.
El mediapunta madrileño llegó al Almería después de que el club llegara a un acuerdo con el Real Madrid por aproximadamente seis millones de euros, adquiriendo el 50% de los derechos del jugador. Esta cifra podría resultar insuficiente en vista de lo que Arribas ha aportado al equipo desde su llegada. A pesar de las dudas expresadas en algunos círculos sobre si estaría a la altura de la Primera División después de dar el salto desde la Primera RFEF, Arribas ha demostrado rápidamente su valía en apenas unas pocas jornadas. Su papel en el Almería es diferente al que tenía cuando jugaba en el primer equipo del Real Madrid bajo la dirección de Zidane y Ancelotti.
Arribas hizo su debut en la jornada inaugural contra el Rayo Vallecano, entrando en el campo en la segunda mitad y aportando un impulso al equipo, lo que le valió una titularidad en el enfrentamiento contra su antiguo club, el Real Madrid. En tan solo tres minutos, anotó su primer gol en la máxima categoría. También fue titular en el partido contra el Cádiz, aunque se quedó en el banquillo en el encuentro frente al Celta, donde nuevamente logró un gol. En el último partido, Arribas tuvo dos titularidades consecutivas y se destacó al liderar al Almería. A pesar de ocupar la posición teórica de extremo izquierdo en la formación 1-4-2-3-1 de Vicente Moreno, demostró su versatilidad al moverse por el centro y desempeñó un papel crucial en las transiciones de defensa a ataque de su equipo. Además, aprovechó dos rebotes dentro del área, donde se siente como en casa, para marcar su primer doblete y elevar su total de goles a cuatro en la temporada.