En el reciente enfrentamiento entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid, David Alaba, uno de los referentes del equipo blanco, se encontró en el punto de mira debido a su participación en al menos dos de los goles encajados por su equipo. Sin embargo, lejos de eludir la responsabilidad, el defensa austríaco decidió enfrentar la situación de frente y dirigirse a la afición blanca a través de sus redes sociales.
En un gesto de sinceridad hacia sus seguidores, Alaba compartió un mensaje breve pero directo, reconociendo que el desempeño de los jugadores dirigidos por Carlo Ancelotti en el partido del pasado domingo no estuvo a la altura de las expectativas. Ancelotti, por su parte, también hizo autocrítica al afirmar en la rueda de prensa posterior al encuentro que los tres goles encajados parecían una repetición, destacando la falta de coordinación, las ayudas tardías y la vulnerabilidad en las bandas, desde donde se originaron los peligrosos balones aéreos que Alaba no logró interceptar en varias ocasiones.
Uno de los momentos más frustrantes para Alaba fue el tercer gol encajado, anotado por Álvaro Morata de cabeza, después de que el defensor austríaco perdiera la marca del delantero español, pensando, aparentemente, que Fran García se haría cargo de la situación. Sin embargo, ni el joven canterano blanco ni Eduardo Camavinga, quien también estaba presente, pudieron evitar el gol de Morata.
A pesar de estos momentos difíciles, Alaba, como uno de los líderes del vestuario, ha asumido la responsabilidad por sus errores y está decidido a levantar cabeza. Ahora, el equipo se encuentra ante el desafío de recuperarse rápidamente y retomar el rumbo. Este compromiso con la mejora y la superación se refleja en su mensaje a la afición.
El Real Madrid ha encajado un total de seis goles en las seis jornadas disputadas hasta el momento, y tres de ellos fueron de cabeza, incluyendo el gol marcado por Sergio Arribas del Almería. Si bien Alaba fue uno de los jugadores señalados, no fue el único culpable, ya que el peligro llegó principalmente desde las bandas, donde los laterales Fran García y Lucas Vázquez parecían desatentos en varias ocasiones. Además, la falta de apoyo desde el centro del campo también contribuyó a los problemas defensivos del equipo.